Contribuir a la detección temprana del cáncer de mama es la mayor motivación del Departamento de Mamografía del Hospital “San Pablo”. Cerrando la campaña “Octubre Rosa”, este servicio insta a mujeres a hacerse el estudio de manera anual desde los 40 años de edad, bajo dirección médica.
¿Para qué una mamografía?
Una mamografía es un medio de diagnóstico radiológico. Puede comprobar que las mamas están sanas, o detectar una lesión cancerígena, aún en estado microscópico, incipiente. Como el cáncer es una enfermedad progresiva, de multiplicación anormal de células malignas, el hallazgo de un cáncer mamario en estado inicial se considera positivo, pues abre mayores posibilidades de éxito del tratamiento y aminora la agresividad de la terapéutica a ser aplicada en cualquiera de las modalidades de la oncología: quirúrgica, clínica (quimioterapia) o radiante.
Dos radiólogas especializadas y con vasta experiencia en mamografía llevan adelante el Departamento de Mamografía del Hospital Materno Infantil “San Pablo”. Son las licenciadas Mirna Acosta y Alba Domínguez.
Vigilar una vez año
¿Cuándo comenzar la mamografía anual?
Acosta responde: “Se hizo un consenso en el año 2017 entre médicos mastólogos, radiólogos, licenciados y técnicos en mamografía y la Sociedad Paraguaya de Mastología. Así, se estableció como protocolo que las mujeres en Paraguay comiencen con una mamografía anual a los cuarenta años. Existen excepciones para el inicio de esta rutina de vigilancia; las determina el médico tratante de la mujer que, en salud mamaria, idealmente debe ser un mastólogo, un ginecólogo o el médico de familia del servicio de salud más cercano. Un caso particular es el de una paciente cuya hermana o madre haya desarrollado esta patología y, por tanto, debe comenzar sus mamografías antes de los cuarenta años. Nuestra sugerencia como Departamento del “San Pablo” sería que una mujer realice su mamografía de base a los treinta y cinco años y, si todo está bien, retomará su control recién a los 40 años.
Trabajo cotidiano en el Departamento de Mamografía
Cada mes, 150 a 200 mujeres se realizan la mamografía en este servicio del Ministerio de Salud. La cifra varía por temporada, aumentando en abril y en periodos en que los hijos de las pacientes se encuentran de vacaciones de verano o invierno.
Generalmente, el Departamento de Mamografía del “San Pablo” es el primer lugar al que acuden las pacientes, queriendo saber si tienen que consultar con un ginecólogo, con un mastólogo. Si ellas encuentran una lesión en la mama con el autoexamen, preguntan si deben ir a la urgencia o si hacerse directamente la mamografía.
“Si vemos que la paciente puede ir a consultorio, le derivamos. Y si es necesario, va a la urgencia, porque hay lesiones que deben ser tratadas primero antes de una mamografía”, resalta la profesional.
Generalmente, las pacientes ya acudieron a su ginecólogo, a su mastólogo, o endocrinólogo y se le agenda su mamografía en el departamento. Cada paciente es informada sobre el protocolo para hacerse una mamografía, que contempla la edad, fecha de menstruación (en el San Pablo se realiza entre el 5º al 10º día del ciclo menstrual, considerando como primer día el del primer día del sangrado. Quienes son irregulares en su ciclo tienen que acercarse al departamento el primer día del sangrado de modo a solicitar turno. Quienes son regulares y tienen certeza de su calendario menstrual pueden anotarse con mayor anticipación). “Tenemos en cuenta los casos especiales de pacientes del interior que acuden acá en gran cantidad. No le podemos mandar de vuelta al interior”, agrega.
Pequeños tips para el día de la mamografía
El día de su mamografía, la mujer debe prepararse evitando el uso de desodorantes, talcos o crema axilar. Ante la menor sospecha de embarazo, debe informar a la radióloga. Es importante archivar la mamografía hasta el año siguiente para que los profesionales de salud la puedan comparar con la del año anterior. La mamografía no causa dolor, únicamente algo de incomodidad para algunas pacientes.
Una historia
La historia del Departamento de Mamografía del “San Pablo” comienza en 2012. Cuenta la Lic. Acosta: “Recibimos el mamógrafo, como donación por parte de la Cooperación Internacional Española. El equipo estuvo trabajando por tres años en el dispensario Santa Lucía, en Villarrica; terminado ese proyecto, donaron el mamógrafo al Ministerio de Salud, y el San Pablo fue identificado como lugar estratégico para ponerlo al servicio de la ciudadanía.
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